Transformación digital
Vivimos desde hace años en un mundo digitalizado: las compras, las citas médicas, los pagos de facturas, las reuniones de trabajo, las conversaciones con amigos y familia y así gran parte de las actividades que antes nos tomaban mucho tiempo o implicaban desplazamiento, ahora las podemos realizar a través de nuestro celular, tablet o computador.
Sin embargo, en el ámbito empresarial el concepto de transformación digital nos confunde y abruma. No sabemos por dónde empezar y constantemente nos encontramos con un mercado exigente que es naturalmente digitalizado.
Empecemos por definir el concepto de transformación digital. El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) la define como: “la adopción de procesos y prácticas de negocios para ayudar a la organización a competir efectivamente en un mundo cada vez más digital”. Esta misma institución rechaza la definición de transformación digital como el mero hecho de implementar o usar tecnología en los procesos, por el contrario considera que factores como: la estrategia, la gestión del talento, la estructura organizativa y el liderazgo son tan o más importantes que la tecnología misma.
La experiencia de empresas que han iniciado con éxito su proceso de transformación digital recomienda la potencialización de sus colaboradores a través de la capacitación constante, la renovación de estructuras organizativas y procesos de negocio como factores fundamentales de cambio.
La tecnología es una herramienta que permite digitalizar procesos y hacerlos más eficientes, sin embargo, es el talento humano y una fuerte estructura organizacional quienes pueden hacer uso eficiente de esas soluciones digitales que existen en el mercado.
La transformación digital se basa en tres ejes fundamentales, el primero: la experiencia del cliente, que debe entender y centrarse en el cliente y crear canales digitales que le permitan al mismo interactuar con la organización, el segundo: el modelo de negocio, que incluye una visión de liderazgo, gobierno y cultura digital, innovación digital, inteligencia de negocio y globalización digital entre otros, el tercero: los procesos operativos: se centran en el colaborador y en su capacitación constante en herramientas digitales ya que a través de este proceso la adopción de tecnologías será menos traumática para la empresa, cree mecanismos de recolección y análisis de datos, para esto no necesariamente debe utilizar un software sofisticado, un colaborador capacitado puede convertir un simple excel en un documento inteligente y generar informes con información valiosa.
Nuestra recomendación es que identifique los procesos sensibles de digitalizarse aunque todas las empresas sin importar su tamaño deben empezar, es un proceso que puede hacerse de manera progresiva.
Invierta en las habilidades blandas de sus colaboradores: el liderazgo, el autoconocimiento, la comunicación asertiva y la gestión de equipos, entre otras, son fundamentales para que funcione, esto debe aplicarse a todas las áreas, mandos y estructuras de la empresa.
Cree una visión digital y determine objetivos que le permitan conseguirla, no desestime el talento humano con el que ya cuenta, son personas que conocen la organización y que con esfuerzo compartido pueden lograr grandes resultados.
Recuerde que hay empresas especializadas como 5Direcciones que pueden acompañarlo en el proceso
Por: Mónica Quimbayo Directora de Gestión de Proyectos